NATURALIZA TU HOGAR: LOS BENEFICIOS DE TENER PLANTAS DE HOJA VERDE EN CASA.
A día de hoy ya pocas dudas quedan de lo beneficioso que resulta para las personas el contacto directo con la naturaleza. Pasar horas al aire libre, hacer deporte en espacios naturales, salir, explorar y maravillarse con los ciclos de la naturaleza. Reconectar con todo ese proceso, no solo tiene efectos positivos en nuestra salud física y mental, sino también en nuestra salud educacional.
Ahora bien, no siempre es fácil tener ese contacto tan directo y asiduo con la naturaleza y por ello, muchas personas, ya no solo llevadas por una razón meramente estética, sino también por razones medioambientales, deciden abrir su hogar y llenar las distintas estancias de maravillosas plantas. Las hay incluso que van más allá y deciden cultivar en el interior de sus casas o en los balcones.
Llenar espacios interiores con plantas de hoja verde no cabe duda que es una manera fantástica, ya no solo de personalizar tu hogar, sino también de llenarlo de vida (en mi caso de más vida aún, después de tres peques y una perrita). Pero ¿Qué beneficios nos aportan realmente las plantas? ¿Qué mitos o peligros albergan?
Las plantas, como seres vivos que son, necesitan dos cosas: alimentarse y respirar. La alimentación y la respiración son dos procesos independientes, aunque en cuanto al intercambio de gases y energía que se producen en una y otra función biológica, son inversos y complementarios.
Voy a hablar primero de la alimentación. Las plantas de hoja verde la hacen a través de la fotosíntesis; la energía lumínica que captan a través de la clorofila de sus hojas (que es lo que les da ese color verde) hace que obtengan el agua y el dióxido de carbono que está en el aire, produciendo almidón, azúcar y otras sustancias orgánicas para su alimentación y desprendiéndose del oxígeno. Este oxígeno es el que utilizan los animales, y también las personas para respirar, expulsando por contra el dióxido de carbono que es de nuevo reutilizado por las plantas.
Durante la respiración ocurre lo contrario, utilizan la sustancia orgánica y el oxígeno para generar dióxido de carbono, agua y energía.
Durante el día, la fotosíntesis adquiere un papel mucho más activo que la respiración, por lo que se produce más oxígeno que el que consume con la respiración, pero por la noche, al no haber luz solar, la fotosíntesis no se produce, llevándose a cabo solo la respiración (tal vez no seamos tan diferentes de las plantas como nos creemos).
Teniendo en cuenta esto se podría pensar, y de hecho se pensaba, que dormir en una habitación llena de plantas podría ser perjudicial. Era eso de: “no coloques las plantas en la habitación que de noche te quitan el oxígeno” (como si te fueran a tapar la nariz o algo por el estilo). Resulta que las plantas, efectivamente utilizan oxígeno pero en una cantidad tan ínfima que sería más probable que nos asfixiáremos antes durmiendo con otra persona o con nuestra mascota que con unas cuantas plantas en nuestra habitación.
De la misma forma que podemos irnos a dormir con la total tranquilidad de que nuestro “tronco de Brasil” no nos va a matar a media noche, tampoco debemos pensar que son milagrosas y nos van a eliminar todas las partículas contaminantes que podemos tener dentro de nuestros hogares. Ninguna planta puede sustituir a una buena ventilación de los espacios. Si queremos tener un aire más purificado en nuestro hogar la solución no es convertir el salón en una selva, sino eliminar la fuente de contaminación y luego si queremos, convertir igualmente nuestro salón en una selva (las plantas pueden absorber una pequeña cantidad de partículas contaminantes pero ni mucho menos limpiar por completo la contaminación que se produce por ejemplo con el simple hecho de cocinar).
Yo nunca fui muy aficionada a las plantas, de hecho, nunca le di importancia a tenerlas, hasta que un día me dio por traer una a casa. Empecé sin mucha expectativa a cuidar de ella, y poco a poco fui viendo su evolución y ya no podía dejar de mirarla ni dejar de preocuparme por ella. A raíz de ahí cada vez que podía traía alguna más, y otra, y luego otra, y poco a poco mi casa fue cambiando. Me he lanzado con un pequeño huerto y he vivido la satisfacción de comer una ensalada de tomates cherry cultivados por una misma, o la diferencia de sabor de mis fresas. El salón y el balcón se han convertido en estancias mucho más acogedoras. No hay día que no de un repaso a todas las plantas para ver cómo están (si necesitan trasplante, abono, agua, si tienen brotes, flores…).
Mantener el foco en el cuidado de una planta tiene grandes beneficios para nuestra salud mental, armoniza nuestro hogar y nos atraen también algún que otro visitante, unos más bienvenidos que otros, lo que nos reconecta que esa parte de nuestro mundo que está sufriendo tanto y que si no nos esforzamos por conocer nunca respetaremos.
Puedes leer mi artículo sobre LA VITAMINA NATURALEZA AQUÍ y el de PARQUES INFANTILES EN MADRID AQUÍ
y su reflexión sobre CULTURA Y DEPORTE AQUÍ
Erica Pérez @deportribu: el deporte ha marcado mi forma de ver, sentir y entender la vida, y no puedo vivir sin él. Abanderada de la corresponsabilidad familiar, puedo hacer muchas cosas, pero no todas al mismo tiempo y sí, necesito ayuda, sobre todo teniendo 3 peques más 1 perrete.
¿QUIERES RECIBIR NUESTROS RETOS FAMILIARES, CONTABILIZADORES DE HORAS AL AIRE LIBRE Y ÚLTIMAS NOTICIAS E HISTORIAS? CONSÍGUELOS AQUÍ.