¡Hola a todos! 

Siento no haber estado por aquí en los últimos 2 meses. Y es que viajar con peques, trabajar, escribir  y tratar de abarcarlo todo a veces se complica y hay que saber cuándo darse un respiro. Seguro que muchos de vosotros sabéis a lo que me refiero.

Nos dimos un descanso estas vacaciones de Navidad, vacaciones de verano por aquí, y pudimos ir a España después de dos años y medio. Tuvimos la suerte de poder hacer unos cuantos viajecitos por allí, e incluso viajes para mi sola que me sirvieron para recargar pilas y darle forma a nuevos proyectos que tengo en mente, ¡pero eso es para otro día!

Hoy quiero hablaros un poco de esta maravillosa ciudad en la que vivimos actualmente, y de la cantidad de posibilidades que ofrece para familias y niños de todas las edades. Es una ciudad llena de espacios verdes que tiene a menos de 1 hora tantas cosas que hacer que me ha resultado difícil escoger.

Puesto que Objetivo Aire Libre trata de conectar con la naturaleza y los espacios abiertos vamos a hablar sólo de aquellas actividades que podamos realizar al aire libre. Los museos y espacios cerrados tendrán que quedarse en el tintero esta vez. 

1. Playgrounds (parques de columpios):

Melbourne está plagado de parques con columpios para niños, es algo que viniendo de España me llamó muchísimo la atención, la importancia que le dan al ocio y los espacios abiertos para los peques. Casi casi en cada esquina te encuentras un espacio verde con su correspondiente playground. Estos están en su mayoría cubiertos por sombra natural (árboles) o artificial (lonas). Están cuidados, limpios y siempre en perfecto estado y en muchos de ellos hay baños públicos, mesas para picnics y barbacoas eléctricas de uso público y gratuito. Todo ello es revisado y limpiado diariamente, y se nota por la cantidad de gente que los usa y el grandísimo respeto que le tienen a la propiedad pública. 

Quiero hacer mención a dos parques en concreto que a mis hijos les encantan; nunca es buen momento para regresar a casa para ellos y nos piden casi cada fin de semana poder pasar un ratillo:

• Booran Reserve en Glen Huntly: dispone de toboganes intrincados, laberintos, zona de agua con fuentes y chorros que salen del suelo, rocódromos, zona de arena… estoy segura que me dejo algo pues es un sitio encantador, no es muy grande pues desde un mismo sitio puedes ver todo el parque y localizar a tus peques fácilmente.

(1051 Glen Huntly Rd, Glen Huntly VIC 

3163)

• Aughtie Drive Adventure Playground in Albert Park: Un poco más antiguo que el anterior pero un precioso parque enteramente de madera que asemeja un castillo medieval. En él es más fácil perder a los peques en su interior pues parece un gran laberinto de madera con zonas cerradas y otras abiertas.

2. William Ricketts Sanctuary: 

Un maravilloso bosque tropical rodeado de helechos donde se puede encontrar parte de la extensa obra de este artista nacido en Richmond, Melbourne en 1898. El parque forma parte de la cultura y entorno Aboriginal Australiano. 

Fácil de recorrer para niños de todas las edades donde se combinan de una forma mágica naturaleza y cultura en forma de estatuas de madera y piedra sumergidas entre la flora Australiana. Se puede visitar, en su interior, la casa en la que el mismo William pasó sus últimos años. 

3. Zorros Voladoresal atardecer: 

A la orilla del río Yarra y en medio de la ciudad podemos encontrarnos con algo tan divertido como ver despertar al atardecer a estos gigantescos murciélagos que alcanzan medidas de hasta 1.5 metros con las alas abiertas.  

Duermen durante el día colgados de los árboles y con la caída del sol poco a poco van abriendo sus alas y alzando el vuelo, con suerte podrás ver a más de uno con su cría a la espalda. Se pueden contar a cientos y de verdad que es algo impresionante si nunca los has visto.

4. Merry Creek Trail and Yarra River:

El río Yarra atraviesa toda la ciudad de Melbourne a lo largo. Hay muchísimos tramos adecuados para ser caminados. Nosotros hemos podido recorrer casi todos, incluso varias veces, por su accesibilidad y facilidad. 

Entre ellos quiero destacar el tramo que atraviesa la granja Collinwood y la abadía de Abbotsford, se puede pasar tranquilamente un día entero entre ambos. El restaurante de comida natural y orgánica de la granja es perfecto para desayunar o almorzar, con opciones para todos los gustos.

Aunque no está en el río Yarra, pues es un pequeño afluente de este, descubrimos no hace mucho el Merry Creek Trail, un camino que está rodeado de espacios abiertos, cascadas, zonas de picnic y de juegos para niños.

5. 1000 steps trail:

Situado al comienzo del Parque Nacional de los Dandenong y un poco más alejado del centro de la ciudad. De un paisaje diferente a todos los trails antes citados este parque natural junta todas las características de un típico bosque Australiano. Poblado de eucaliptos de diferentes clases, y bajos arbustos se pueden avistar todo tipo de pájaros autóctonos como loros, cacatúas y kokaburras. El trayecto de los 1000 steps es un poco avanzado para niños menores de 5 años, pero hay una gran variedad de paseos más cortos y fáciles alrededor. 

Recomiendo no salirse del camino, pues aquí, como en todo Australia, puedes tener la mala suerte de encontrarte con animalitos no deseados, como serpientes o insectos venenosos. No es muy común que surjan incidentes ya que en su mayoría la gente es muy respetuosa con la fauna y con las reglas a seguir.

6. Puffing Billy train rail:

Situado también en el Parque Nacional de los Dandenong. Este sorprendente recorrido en un antiguo tren de vapor es algo que creo que niños y adultos de todas las edades deben de vivir, como salido de un cuento o de una película de Harry Potter, este recorrido en tren por los bosques no os dejará inadvertidos. Recomiendo llevar comida pues a lo largo del camino y en las paradas podéis encontrar lugares preciosos donde parar a comer rodeados de naturaleza.

7. Healesville Sanctuary: 

Situado en el Yarra Valley y a unos 55 minutos de Melbourne se encuentra este maravilloso zoológico. Forma parte de Zoos Victoria y está exclusivamente dedicado a la fauna Australiana. Es respetuoso al máximo con el medio ambiente y con los animales; Dispone de aulas de aprendizaje y de conservación de especies y tiene un amplio centro veterinario dedicado a curar, ayudar y reintegrar a animales salvajes.  

Una vez visitado Healesville Sanctuary, el concepto de lo que un zoo debería ser ha cambiado en mi permanentemente, nunca me gustaron los zoos pero esto es completamente diferente; embebido en naturaleza y flora Australiana, con animales en extensos recintos abiertos al público en muchos casos no parece un zoo sino más bien un paseo por los bosques Australianos.

Espero que os hayan gustado todas estas recomendaciones. Si tenéis alguna duda, no olvides escribirme a mi cuenta en Instagram @traveller.mum. Estaré encantada de ayudaros. Para el próximo episodio tengo reservado algo especial también por aquí por Australia que espero que os guste. ¡Nos vemos el mes que viene!

Puedes leer nuestros artículos anteriores: CON LA VIDA A CUESTAS EN MOCHILA… ¡MOCHILA PORTABEBÉS! y VOLAR CON NIÑOS: TODO LO QUE NECESITAS SABER PARA SOBREVIVIR CUALQUIER TIPO DE VUELO

Sarai Vega: Madre aventurera experta en viajar por todo el mundo con sus 2 hijos y su casa a cuestas (o como viajar con lo basico) @traveller.mum