Escribo este post a finales de junio de 2023, en el último día de nuestro viaje familiar de 12 días por Noruega. Hemos alquilado un coche eléctrico para movernos por el país. Maravilloso país, por cierto, como puedes ver en el vídeo de nuestro viaje.

Antes de salir me tocó investigar sobre si merecía la pena alquilar un eléctrico o era mejor tirar por lo conocido, por un motor de gasolina o un híbrido. Yo no me había subido a un eléctrico en mi vida, hasta que aterrizamos en Oslo, así que tenía muchísimas dudas y me puse a buscar información, como supongo estás haciendo tú ahora.

Y ya sabes cómo es eso, empiezas a leer puntos a favor y en contra, cuando uno lo que quiere es una respuesta contundente y clara. Pues bien, ahí va: alquilar un coche eléctrico en Noruega es un acierto. Pero sin duda. Y ahora te explico por qué:

INCONVENIENTES:

Empiezo por lo malo, por lo que nos da miedito. Supongo que como era mi caso, la principal preocupación es la autonomía del coche, que a día de hoy (año 2023) es claramente inferior al motor de gasolina.

Nosotros alquilamos un Volkswagen iD4 que tiene una autonomía de unos 450 kilómetros. Esa autonomía es muy fiable si conduces en llano, y se reduce rápidamente si subes montaña (el eléctrico se carga cuando frenas, si solo subes cuestas consume mucho más).

Con esa autonomía pudimos hacer la mayoría de los trayectos. Pero Noruega es un país grande e hicimos también tramos más largos que nos obligaron a hacer una parada. ¿Es eso un problema? No lo es.

Primero, porque el número de puntos de carga del país es espectacular y crece rápidamente. Si estás en un sitio remoto, perdido en las montañas, te será más fácil encontrar un punto de carga eléctrico que una gasolinera convencional.

Escribo este post en la cabaña que ves en la foto. El dueño tiene la instalación para cargar aquí el coche. Aunque no la tuviera, se puede cargar con un enchufe normal, si bien es muy lento, pero podrías salir de un apuro más fácilmente así que si necesitaras una gasolinera. Por aquí, donde estoy ahora, no hay ninguna cerca.

Mi segunda preocupación era cuánto tarda en cargarse la batería. Aquí una vez más hay que tener en cuenta lo rápido que va la industria. A día de hoy, el Volkswagen que alquilamos se puede cargar en 40 minutos en una estación que tenga puntos de 150kw, o en 48 horas si lo enchufas a la red como si cargaras un móvil. En la cabaña donde estoy ahora, la de la foto de arriba, la carga completa dura unas 5 horas.

Cuando alquilamos el coche, nos dieron dos adaptadores con los que puedes enchufar el coche donde sea. Encontrar dónde cargarlo, como decía, no es problema. El tiempo de carga, tampoco demasiado, aunque requiere una mínima planificación (o esperar 40 minutos).

En Bergen dejé el coche cargando durante la noche en una estación pública que estaba a 5 minutos de nuestro Airbnb. Normalmente, cuando más lenta es la carga, más barata sale. Así que elegí la opción más económica (22kw) y cuando me levanté ya estaba al 100%. Lo mejor es que eso lo ves en una aplicación en el móvil. Y ese, sin embargo, es en mi opinión el inconveniente real del coche eléctrico a día de hoy.

En mi experiencia, ni la autonomía ni el tiempo de carga han supuesto ningún tipo de obstáculo. Pero las App que necesitas para encontrar los puntos de carga y, sobre todo, para pagar, fueron MUY frustrantes al principio. Alquilamos el coche con Hertz, nos instalaron una App en el móvil (Elton) y en principio todo tendría que haber sido súper fácil. Pero no, esa aplicación rara vez funciona, al menos para mí, y si no consigues conectar la App con la estación de carga estás perdido, porque en las estaciones no se puede pagar ni con tarjeta ni en efectivo. Así que me puse a instalar Apps como un loco (Circle K Charge, Shell Recharge) hasta que encontré la que a mí me funciona siempre y sin problema: Bilkraft.

Una aplicación sencilla, en inglés (no hay posibilidad de español actualmente), que ofrece muchísimos puntos de carga, y hace el pago y el seguimiento de la carga muy fáciles.

En mi opinión, en Noruega no hay ningún problema con el coche eléctrico, hay un problema de dar con la aplicación correcta, porque opciones hay demasiadas y no todas son buenas.

PUNTOS A FAVOR:

Aquí tienes para todos los gustos: ecologismo, disfrutar de una experiencia nueva, aprender sobre esta nueva tecnología… Y económica, claro.

Noruega es un país líder en coches eléctricos. Un país que vende más eléctricos que coches de gasolina, que ha hecho una apuesta grande por esta tecnología. Los incentivos económicos como descuentos al aparcar, peajes o carga gratuita en centros comerciales yo creo que son cosa del pasado en Noruega. Todavía ahorras algo en peajes, pero no es eso lo que merece la pena, y aparcar en Oslo o Bergen cuesta lo mismo con independencia del motor que utilices.

La diferencia económica está, primero, en lo que cobran las compañías de alquiler. En nuestro caso, la opción de Hertz del eléctrico era un 30% más barata que alquilar uno de gasolina.

Y en segundo lugar, el precio de la gasolina, que es más cara que en España.

El dueño de la cabaña donde estamos nos cobra €20 por cargar la batería. En la anterior, nos dejaban enchufar el coche gratis. Cuando lo cargué en Bergen, en la estación que comenté arriba, pagué €40. Así que en la opción más cara de nuestro viaje, cada 100 kilómetros nos salen a unos 11,25€.

La gasolina en Noruega está actualmente a 2€ el litro. Si hubiéramos alquilado un Golf con un consumo de 7 litros, habríamos pagado unos 14€ cada 100 kilómetros. La diferencia no es abismal, pero esta es la opción más cara. Hemos cargado la batería gratis muchas veces, mientras que llenar el tanque de un Golf costaría 100€.

CONCLUSIÓN

Si tuviera que volver a alquilar un coche en Noruega para hacer un viaje como el que estamos haciendo, sin duda repetiría con un eléctrico. Pero esa es una opinión personal en base a mis gustos, no creo que haya un claro ganador objetivo a la hora de comparar las dos opciones.

Incluso el factor más neutral, el económico, depende de cómo te organices. Si cargas el eléctrico en las opciones más rápidas de las estaciones públicas, no creo que ahorres demasiado respecto a la opción de gasolina.

Así que todo depende de tus gustos, elige la opción que más vaya con tu manera de viajar:

- ELÉCTRICO: Si quieres probar algo nuevo o ahorrar dinero planificando cómo repostar de manera económica.

- GASOLINA: Si no te apetece experimentar o no quieres preocuparte de encontrar puntos de carga, aplicaciones para hacer los pagos o alojamientos con la opción de cargar la batería.

Álvaro Mediavilla es un papá viajero y aventurero que cree en la crianza al aire libre, en la naturaleza y con una gran dosis de movimiento. Este año se inicia en las andaduras del homeschooling, con emoción y muchas expectativas por delante. Lo encontrarás en su proyecto para profes de español
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